En la última página de un cuento de hadas,
como una tragedia, de nuevo al final se reescribió.
Y de vista perdí el corazón de ese único ser
en que siempre mi alma confió.
El amor y los sueños no son nada más
que castillos de arena
efímeros y desmoronados ante ti,
aunque eso no es lo que deseabas tú.
Pero aún no he podido olvidar la canción que escuché,
la que tú sin cesar no dejabas de cantar.
Cada vez que la oigo sonar pienso que puede ser
que el ayer vuelva un día a regresar.
Y que voy a volver y de estas cadenas
que hoy me someten con tantas penas
pronto me voy a liberar,
volviendo a reencontrarme con el mar.
Ya está claro,
ya sé que el amor
superará cualquier bloqueo.
Incluso sé, que cambiará
nuestro destino sí, lo creo.
La mala estrella al fin se apagará.
La ignoraré.
Que venza mi deseo.
En la última página de un cuento de hadas,
como una tragedia de nuevo al final se reescribió.
Y de vista perdí el corazón de ese único ser
en que siempre mi alma confió.
El amor y los sueños no son nada más
que castillos de arena
efímeros y desmoronados ante ti,
aunque eso no es lo que deseabas tú.
Pero aún no he podido olvidar la canción que escuché,
la que tú sin cesar no dejabas de cantar.
Cada vez que la oigo sonar pienso que puede ser
que el ayer vuelva un día a regresar.
Y que voy a volver y de estas cadenas
que hoy me someten con tantas penas
pronto me voy a liberar,
volviendo a reencontrarme con el mar.
Tú estás ciega, ante la verdad.
Dudar te nubla el pensamiento.
Te inventas una realidad
sobre un amor sin fundamento.
Supera tu debilidad.
No esperes más, sé fuerte y toma aliento.
Un amanecer me desperté
y escuché las olas al romper.
En la quietud, sentí que
iba a renacer.
Con el cálido abrazo de
esa luz del sol y su calor.
A mi hondo mar regresaré.
La esperanza es mi motor.
Cuando empiecen a sonar
las campanas de la felicidad
y por fin, brillen ya los siete mares.
El milagro del amor
volveré a contemplar
con ese ser al que yo
amo y amaré.
Y al que suavemente
un beso le podré dar....
Qué triste es esta canción... Es mi favorita de todas las de Mermaid Melody, anime que veo por la música. Es la canción de Sara, uno de los personajes que más me gustan por su trágico pasado, sus deseos de venganza y su arrepentimiento final.
Sara, princesa del Océano Índico, la Perla Naranja, conoció al pianista Taro Mitsuki cuando este estaba en India intentando encontrarse a sí mismo. Se enamoraron, pero Taro decidió marcharse y dejar a Sara para que pudiera cumplir sus deberes de princesa sirena. Desolada por la pena y sintiéndose traicionada, destruyó su reino; si la razón por la que Taro la abandonó fue que era una princesa sirena, dejaría de serlo.
Se volvió negra y fue a vivir al palacio de Gaito, planeando su venganza contra Taro y la humanidad en general. En el capítulo final de la primera temporada , se arrepiente y su pelo recupera el color naranja. Acaba hundiéndose con Gaito y su palacio.
Este anime tiene canciones deprimentes; a mí esta es la que más pena me da.
P.D.: los dos collages son míos, dad créditos si lo usáis por favor.
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